Consecuencias fiscales de la liquidación o negociación de deudas (guía sencilla)

La liquidación de deudas puede ser una gran opción de alivio de deuda para muchos, pero puede venir con ciertas implicaciones fiscales para algunas personas.

La resolución de deudas es una opción popular para las personas afectadas con grandes cantidades de deuda.

Consiste en negociar con los acreedores para saldar la deuda por menos de lo que se debe. Esto puede ayudar a aliviar el estrés financiero y hacer que los pagos sean más manejables. 

Sin embargo, es importante entender que puede haber consecuencias fiscales asociadas a la liquidación de deudas, aunque no afectarán a todo el mundo. 

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PUNTOS CLAVE:

• La liquidación de deudas puede dar lugar a ingresos imponibles, aunque la mayoría de los que se acogen a la liquidación de deudas también son insolventes, lo que les exime de tributación.
• La deuda cualificada está exenta de impuestos.
• Es importante mantener registros precisos y consultar con un profesional fiscal si no sabes con certeza si  tendrás que pagar impuestos sobre tu deuda saldada. 

El enigma de la renta imponible

Uno de los errores que comete la gente cuando se trata de la liquidación de deudas es asumir que nunca tendrán que pagar impuestos sobre la cantidad condonada. 

Esto se debe a que, en la mayoría de los casos, la deuda que se condona o cancela se considera un ingreso imponible por el Servicio de Impuestos Internos (IRS).

En cambio, si saldaras la deuda en su totalidad, no tendrías que pagar impuestos por ella. El motivo es que el IRS (Departamento de Impuestos) considera que la deuda normalmente se paga y la parte cancelada es un ingreso. 

Sin embargo, hay algunas excepciones a esta regla, como veremos a continuación. 

La deuda cualificada está exenta de impuestos

El IRS (Departamento de Impuestos) prevé una excepción para determinados tipos de deuda que pueden saldarse sin dar lugar a ingresos imponibles. 

Esto se conoce como deuda cualificada e incluye cosas como préstamos estudiantiles, hipotecas y deudas comerciales. Para que este tipo de deudas se consideren cualificadas, deben haberse utilizado para un fin específico y cumplir determinados criterios establecidos por el IRS. 

Es importante tener en cuenta que las deudas de tarjetas de crédito no se consideran deudas cualificadas y darían lugar a ingresos imponibles si se liquidaran.

La deuda condonada como parte de una donación o legado tampoco está sujeta a tributación. 

Esto significa que si un familiar decide perdonar tu deuda, no tendrás que incluir la cantidad condonada como renta imponible. 

La condonación de deudas se refiere a la cancelación de una parte del monto adeudado a cambio de reducir el total de la deuda.

Cuando se trata de bienes inmuebles, la deuda contraída para la compra de una vivienda habitual también está exenta de impuestos si cumple determinados criterios. 

Esto puede incluir deudas hipotecarias, préstamos con garantía hipotecaria e hipotecas refinanciadas. 

Las deudas relacionadas con la empresa, como las contraídas para la compra de propiedades de alquiler, también pueden estar exentas de impuestos.

La clave es la precisión y la orientación profesional

Uno de los pasos más importantes a la hora de abordar las implicaciones fiscales de la liquidación de deudas es llevar un registro preciso. 

Esto incluye documentar el importe original de la deuda, los pagos realizados para saldarla y el importe condonado. También es importante guardar copias de toda la documentación recibida de los acreedores o de las empresas de resolución de deudas.

Trabajar con un profesional fiscal también puede ser extremadamente beneficioso para navegar por las complejidades de la legislación fiscal y determinar si tu deuda condonada entra dentro de las excepciones señaladas por el IRS. 

Pueden ofrecerte asesoramiento profesional y ayudarte a comprender las implicaciones fiscales de tu acuerdo negociado de deudas. También pueden asistirte con la presentación de los formularios fiscales necesarios y el reporte preciso del monto condonado.

¿Cómo afecta la liquidación o resolución de deudas a tus obligaciones fiscales?

La negociación de deudas puede afectar tus obligaciones fiscales. Como se mencionó antes, la deuda condonada generalmente se considera ingreso gravable y debe reportarse al IRS. Esto significa que, si negocias una gran cantidad de deuda, podrías terminar debiendo más en impuestos de lo que habías anticipado.

Por ejemplo, imaginemos que debes $10,000 en tu tarjeta de crédito. Tal vez trabajas con un negociador de deudas o logras convencer a tu acreedor de aceptar una oferta de acuerdo por $5,000. 

Los $5,000 restantes se consideran deuda condonada y deben ser reportados al IRS como ingreso gravable.

Cuando esto sucede, es probable que recibas un formulario 1099-C, "Cancelación de deuda", del acreedor que te perdonó/redujo la deuda.

NOTA IMPORTANTE SOBRE INSOLVENCIA E IMPUESTOS

En la mayoría de los casos, la mayoría de las personas que reciben uno o varios formularios 1099-C eran insolventes o casi insolventes cuando se les condonó la deuda. Tenían muchas otras obligaciones que les pesaban financieramente. 

Rellenando el formulario 982 del IRS es posible que NO tenga que pagar el impuesto sobre la renta correspondiente a la deuda condonada.

Sin embargo, la situación fiscal de cada individuo varía, por lo que es importante consultar con un profesional fiscal para determinar el impacto exacto en tus impuestos.

Métodos eficaces para reducir tu deuda tributaria tras la liquidación de deudas

A pesar de las obligaciones fiscales derivadas del alivio de deudas, aún puede ser una forma efectiva de gestionar tus deudas y recuperar la estabilidad financiera. A continuación, te presentamos algunas otras estrategias que podrían ayudar a reducir el impacto en tus impuestos…

Quiebra: La deuda que se salda mediante la quiebra no se considera renta imponible, aunque la quiebra tiene importantes consecuencias financieras negativas a largo plazo y sólo se considera como último recurso.

Solicitud de deducciones: Es posible que puedas beneficiarte de determinadas deducciones, como la Ley de condonación de deudas hipotecarias para reducir tu carga fiscal.

Pagos a plazos: Si no puedes pagar la totalidad de la deuda tributaria de una sola vez, puedes solicitar un acuerdo de pago a plazos con el IRS y realizar los pagos a lo largo del tiempo.

Calendario: Si tienes control sobre el momento de tus acuerdos, considera retrasarlos hasta un año fiscal en el que esperes deber menos. Si anticipas ganar menos en un año determinado, podrías compensar el ingreso gravable de la condonación de deuda, ya que es posible que tu tramo impositivo sea más bajo.

Insolvencia: Si tus pasivos son mayores que tus activos en el momento del acuerdo de deuda, puedes, como se mencionó anteriormente, presentar el Formulario 982 del IRS y calificar para una exclusión por insolvencia, evitando así pagar impuestos sobre el monto condonado.

Buscar ayuda profesional

Navegar por las implicaciones fiscales de la resolución de deudas puede resultar complicado y abrumador. 

En Americor entendemos los retos financieros a los que se enfrentan las personas hoy en día.

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